Cuentárboles es una plataforma de participación ciudadana que mediante una sencilla App permite tomar una fotografía georreferenciada² de los árboles.  Este proyecto es el resultado del trabajo conjunto de: Colectivo Ambientalista Núcleo Verde, CentroGeo, Consorcio Intelinova, IMPLAN Aguascalientes y el Instituto para el Desarrollo de la Sociedad del Conocimiento (IDSCEA).

Se trata de una iniciativa que busca generar y divulgar conocimiento valioso en materia ecológica, científica, educativa y social. Con la ciudadanía como principal protagonista en el proceso de censado de los árboles, se genera información pública con disponibilidad en tiempo real en la plataforma cuentarboles.org. También pueden participar empresas y personas físicas como patrocinadores bajo la figura de amigárboles.

Aunado al impacto social, Cuentárboles tiene el objetivo de producir información que contribuya a la toma de decisiones para la generación y evaluación del impacto ecológico y ambiental de políticas, programas, estrategias y proyectos públicos.

El procedimiento de registro e instalación de Cuentárboles es muy sencillo. Primero, el ciudadano o censor descarga y activa la App en su dispositivo móvil desde cuentarboles.org. Para usarla, sólo debe tomar una foto del árbol completo usando un objeto de referencia e indicando la altura del mismo. En ese instante, la ubicación del árbol se marca en un mapa y queda automáticamente registrado. Actualmente se puede ingresar una descripción de 140 letras para cada árbol censado. La información generada por los ciudadanos será corroborada por un equipo de verificadores capacitados para clasificar e identificar las distintas especies de árboles existentes en el estado.

A su vez, se producirá conocimiento científico con el desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial para: el conteo automático de árboles a partir de imágenes satelitales e imágenes de vehículos aéreos no tripulados (drones); la identificación de especies; la estimación de la altura y edad del árbol; entre otros. Se buscará, además, generar modelos que contribuyan a determinar el valor económico y los servicios ambientales de las diferentes especies de árboles a partir de la cuantificación y cualificación de los diversos beneficios que, además de su belleza y sombra, nos brindan. Por nombrar algunos:

1. Beneficios ambientales: Permiten la recarga de las aguas subterráneas; sirven como barrera contra ruidos; son elementos que fomentan la biodiversidad; regulan la temperatura; generan oxígen; absorben los olores y gases contaminantes, y son elementos de confort para áreas de recreación [1].
2. Beneficios sociales: Hacen la vida agradable y brindan serenidad, sosiego, descanso y tranquilidad. La relación entre las personas y los árboles se hace evidente cuando los vecinos se oponen a que estos se talen [2].  
3. Beneficios comunitarios: Incluyen funciones arquitectónicas como enfatizar vistas u ocultar aquellas que son desagradables, reducen la luz intensa y los reflejos indeseados o molestos; suavizan, complementan o realzan la arquitectura. Además, proporcionan elementos naturales para la vida silvestre en los alrededores urbanos [1].
4. Beneficios económicos. Están asociados habitualmente con los costos energéticos debido a que el uso tanto del aire acondicionado como de la calefacción disminuye en los hogares con árboles [2].