“En la penumbra” (Aus dem Nichts) (2017) es una película escrita y dirigida por Fatih Akin y protagonizada por Diane Kruger, Denis Moschitto y Numan Acar. Probablemente será recordada como el filme que le dio a Diane Kruger el galardón a mejor actriz en el festival de Cannes, siendo Kruger conocida desde hace tiempo en las carteleras estadounidenses y mexicanas por blockbusters como National Treasure e Inglorious Basterds, y por muchos otros como una película relevante frente al nacimiento, renacimiento o reconocimiento del fascismo en los titulares de Occidente.
Sin revelar algo que no esté en el avance, la trama ronda la siguiente historia: un matrimonio entre una alemana y un alemán de origen turco se ve interrumpido cuando el segundo es alcanzado por una bomba puesta justamente frente a su negocio. La feliz pareja tiene un niño que casualmente fue dejado en el trabajo de su padre ese día, por lo que la tragedia alcanza a ambos. Katja (Kruger), a partir de entonces, se enfrenta no sólo a un insoportable duelo que el espectador siente hasta la médula, sino a la búsqueda de justicia. El tribunal, a pesar de no parecer viciado por prejuicios de raza y antecedentes penales (Nuri, esposo de Katja, cumplió sentencia por tráfico de hachís) sí cuenta con un abogado defensor que trae los anteriores con el afán de desacreditar evidencia que a los ojos de casi cualquiera parecería suficiente para encerrar a los sospechosos. Hasta aquí con lo que puede ser revelado sin arruinar la película.
Katja, o bien, Kruger, sostiene toda la película. No sólo porque el dolor de perder a su familia es magistralmente retratado, sino por otra serie de sentimientos que vienen después de la tragedia. Odio, desde luego, e incertidumbre, pero también una perdición o un deseo de ella que cualquiera que haya experimentado una pérdida tan terrible entenderá. Katja, en un primer momento, busca adormecerse, y mientras más nos es presentado de su natural familia, lo mismo pasa con nosotros, que observamos. No es porque se vean felices, no es porque el niño sea una dulzura en voz y ocurrencias propias de un pequeño de seis años, o porque el matrimonio parezca ser un matrimonio que funciona; es porque toda la vida de Katja, a pesar de su evidente naturaleza rebelde, gira en torno a esas dos personas. La observamos tener amistades, principalmente en su abogado (Moschitto) –quien hace todo lo posible por dar paz a esa mujer en desgracia–, y contar con familia y conocidos, pero la pérdida sufrida sobrepasa cualquier otro lazo que pudiera tener o salvarla.
A pesar de que la película termina llevándonos al deseo de la protagonista de hacer justicia a toda costa, no es éste un filme de venganza al estilo de Búsqueda Implacable en donde Liam Neeson hace alarde de sus dotes de jedi, olvidándose que no se encuentra ya en esa película, y haciendo tontos a secuestradores profesionales. No, no es el caso de En la penumbra. Primeramente, porque Katja no tiene el primer instinto de hacer justicia por su cuenta, sino que debe sentarse en un tribunal de justicia a escuchar detalle a detalle como murió su hijo con los sospechosos frente a ella, inmóviles y casi idiotizados. La brillantez de la actuación de Kruger, a mi parecer, es mayormente por estas escenas de odio contenido. ¿Cómo se actúa eso?, ¿cómo podemos ver casi la úlcera de esa mujer formarse y el sudor brotar por su frente cuando está sólo pretendiendo? Ver retorcerse a Kruger en su silla por un poco más de media hora me infundió más ansiedad que cualquier escena de persecución que haya visto en los últimos años, lo que ya es algo qué decir. Verla tomar drogas duras para adormecer el dolor, sin sentir algo de placer, sino simplemente nada, me dio paz. Paz por ella, porque eso es lo que sucede en una buena actuación, sea la misma con fines empáticos o complicados. Es la misma sensación de entendimiento que se tiene por Jesse Eisenberg al final de The Social Network cuando está sentado en su soledad con más de un millón de amigos virtuales en esa trampa social en la que no sólo él mismo se metió, sino inventó; es una empatía frente al dolor, como en este caso, pero también frente a los errores, porque un retrato humano es eso, complejo y no perfecto, y nos vamos a ver en eso, así sea Forrest Gump o un redimido Darth Vader.
Y desde luego, mantengo la postura en que este nivel de reflexión es dado por la actuación de Kruger, pero no dejaré de lado un elemento más que nos lleva a sentir lo que el personaje principal siente: el crimen, como fue predicho casi desde un primer momento por Katja, fue perpetuado por nazis.
Con el resurgimiento de noticias sobre manifestaciones de odio nazi, cabe preguntarse si en efecto el diálogo con los auténticos y terribles portadores de esta ideología puede ser establecido. En opinión de Churchill, imposible. El nazismo debe cortarse de raíz. En opinión de otros, éste puede darse y de alguna manera debemos respetar esa postura de odio, así se contravenga a todo lo civilizatoriamente establecido desde tiempo antes de que se hablara del contrato social para someternos a un gobierno ordenador.
Sin dejar entrever demasiado mi postura –aunque sea de alguna manera clara– puntualizaré en que ésta es una película alemana, que sí, fue aclamada en Cannes. El mismo Cannes que prácticamente expulsó a Lars Von Trier cuando hizo su infame declaración de “comprender a Hitler”, y aunque muy al contrario de condenar esta expulsión la entiendo, no dejaré de lado el hecho de que Cannes, como Hollywood, tiene una alineación política aún identificada con los Aliados de la Segunda Guerra Mundial. Entonces, ¿en qué varía que sea una película que condena a los nazis? Kruger participó ya en Inglorious Basterds, donde fuera de rodeos le clavan cincuenta balas a Hitler en la cara. Pero en este caso hay algo distinto, y es que no es un contexto de guerra y no se encuentran fuera de Alemania. El único acto que suscita la violencia viene de un deseo de raza pura propio de los nazis. Y no sólo eso, se ubica en la actualidad y se dan datos de los crímenes motivados por esta misma causa en el país.
No es de buen gusto que una película sea demasiado alineada o demasiado política. No creo que sea el caso de En la penumbra.
//Pero sí dejan un punto en claro: concuerdan con Churchill, la hierba mala debe arrancarse, arrancarse así, sin cura y sin diálogo, porque la oportunidad de diálogo es dar aras a defender algo indefendible.
El abogado de Katja lo dice claramente en un corto pero monumental monólogo: dar palabras a ese lado es alinearse con ellos. La realidad supera la ficción, y aquí el cine da una miradita a un fenómeno aún mayor; como si actualmente esa misma premisa de entablar diálogo con una postura de odio no tuviera ya suficientes plataformas, suficientes seguidores, suficientes presidentes que, casualmente, tiran un par de palabras también contra nuestra propia raza, no muy lejos de un discurso de prejuicio como el que mató a la familia de Katja.
1 Lic. en Derecho por la Universidad Autónoma de Aguascalientes y Mtra. en Investigaciones Sociales y Humanísticas por la misma universidad
En cada número encontrarás en este espacio textos de reflexión sobre temáticas de vanguardia para el mejoramiento de la universidad y la comunidad aguascalentense.
Estefanía Diaz
Flor Morales
“La poesía es el sentimiento que le sobra al corazón y que te sale por la mano”, Carmen Conde (1907-1996).
Disfruta de una miscelánea de artículos interesantes y de fácil lectura sobre temáticas de humanidades, educación y cultura.
Francisco Donlucas
Omar Serna Rodríguez
Gabriela Gpe. Delgado Villaseñor
Pilar Alejandra García Ayala y Alberto Sustaita Muñoz
Recordar es vivir. Espacio para el encuentro con las memorias y los recuerdos de los profesores de la UAA. “Docentes y amigos de antaño”.
Fernando Jaramillo Juárez
Accede a los últimos avances científicos y tecnológicos, tanto locales como nacionales e internacionales, así como a los realizados desde la universidad para mejoramiento de la sociedad aguascalentense. Anímate a participar en nuevos proyectos de creación e innovación.
Encuentra aquí sugestivas radiografías del Séptimo Arte y disfruta cabalmente tu película favorita.
La Libertad del Diablo: un ensayo sobre esa realidad de la que nadie habla[+]
Entérate aquí de los acontecimientos más destacados y de relevancia para la comunidad universitaria y la sociedad aguascalentense.
Descubre las novedades literarias que recomendamos a nuestros lectores. Sumerge tu imaginación en mundos inexplorados y empápate de nuevos saberes.
Prefigurando futuros habitables: apuntes de una reflexión compartida (segunda parte)[+]
Los rinconcitos más cálidos de la ciudad que puedes visitar en tu tiempo libre. No dejes de conocerlos.
Drama, comedia y tragedia. Disfruta de todas las emociones que despierta el talento artístico teatral de Aguascalientes.
Más información en:
uaa.mx/direcciones/dgdv/difusioncultural/
facebook.com/munalmueruaa
museonacionaldelamuerte.uaa.mx
facebook.com/CulturaUAA
Mayores informes al 910 74 00 Ext. 9030 o en elvia.farfan@edu.uaa.mx
Recuerda que puedes seguir nuestra señal en los Canales 23 de Univisión, así como en su plataforma virtual tv.uaa.mx o dale “Me gusta” en facebook.com/tvuaaoficial y descarga la App. Mayores informes al 910 9260 y 910 9261 o al correo:ijhernaf@correo.uaa.mx y en el twitter @tvuaaoficial.
En Aguascalientes se empezaron a formar huertas desde fines del siglo XVI, poco después de fundada la villa, y durante el siglo XVII se multiplicaron en forma asombrosa...
[Disponible en Librería UAA]
Estudio de carácter histórico, durante el periodo comprendido de 1832 a 1925, acerca de la enseñanza del dibujo en la ciudad de Aguascalientes.
En Calvillo, Aguascalientes, los jóvenes varones homosexuales se constituyen como sujetos desde la confluencia de diversos referentes socioculturales que van demarcando su campo de experiencia...
[Disponible en Librería UAA]
Títulos seleccionados para descarga gratuita.
Mayores informes en: uaa.mx/direcciones/dgdv/editorial/, facebook.com/editorialUAA Al tel. 910 74 54, correo: mespar@correo.uaa.mx mespar@correo.uaa.mx o 910 74 00 ext. 235, correo: librería@correo.uaa.mx