La película La mujer más odiada de América trata sobre la lucha social por los derechos fundamentales (derecho a la libertad de creencia y de religión) que impulsó Madalyn Murray O’Hair, promotora del ateísmo en los Estados Unidos y fundadora de la Asociación Ateos de América.

 Es un drama de la polémica vida de Madalyn Murray O’Hair que nos da una idea de su vida personal, de la lucha por sus ideales e incluso de los últimos días antes de ser asesinada.² El film es dirigido por Tommy O’ Haver (An American Crime), y es protagonizada por Melissa Leo, Juno Temple y Josh Lucas.

El filme expone la situación que se vivía en los Estados Unidos en los años sesenta y setenta del siglo pasado en cuanto a las libertades individuales, como son la libertad de creencia y de religión. A pesar de que dichos derechos fundamentales estaban contemplados en la Primera Enmienda de la Constitución Norteamérica, no eran respetados pues se imponía una creencia determinada en diferentes ámbitos de la vida social –como en la educación, aunque ésta fuese pública, ya que a los estudiantes se les obligaba a orar independientemente de sus creencias–.

La película permite reflexionar sobre la situación en la que se encuentran los derechos fundamentales, ya que a pesar de que están escritos en la Constitución, en varias ocasiones son letra muerta. Y esto no sólo es culpa del Estado sino de los propios ciudadanos que se muestran intolerantes a otro tipo de creencias, como se ve claramente en el largometraje.

// El Estado tiene la obligación de proteger dichas libertades que están encaminadas hacia la libertad de creencia, de religión, de expresión, de manifestación y de educación, entre otras.

Madalyn Murray O’Hair fue una revolucionaria que quería romper con los paradigmas sociales de esa época que estaban muy arraigados. A pesar de la discriminación y las constantes críticas, Madalyn Murray O’Hair siguió con su lucha. Abogó por un Estado laico y consiguió que la Corte emitiera una ley que prohibía que se hiciese oración en las escuelas públicas.

Un Estado laico protege y defiende enérgicamente la libertad de religión y creencia, ya que trata de evitar cualquier tipo de autoritarismo e intolerancia. Debemos luchar por la libertad religiosa pues dicha libertad nos da la opción de afiliarnos o no a un credo religioso.

Otro aspecto fundamental que sobresale en la película son los medios de manipulación que utilizan los diferentes credos –sean religiosos o no– sobre las personas, pues el único objetivo que buscan estas asociaciones es el lucro, lo cual es muy lamentable y degradante dado que juegan con la fe de los individuos.

La película tiene dos vertientes: por un lado, habla sobre la trágica vida y muerte de Madalyn Murray O’Hair y, por otro lado, habla sobre la dramática vida de su hijo mayor, el cual siempre estuvo sometido a su madre. Se expone a Madalyn Murray O’Hair como víctima y malvada a la vez.

Para que un Estado se considere laico, mínimo debe ser neutral conforme a los diferentes credos. Me refiero a que no debe existir preferencia alguna sobre una religión en específico. El Estado debe velar por la igualdad de derechos de sus individuos quienes están obligados a respetarse mutuamente para coexistir en una sociedad estable.

Cuando el Estado se muestra imparcial, en referencia a los cultos religiosos, no significa que muestre una actitud pasiva, ya que tiene que hacer el máximo esfuerzo por abstenerse de realizar conductas que afecten a la libertad religiosa, como el favorecer un credo por encima de otro.

La película nos enseña que debemos luchar por nuestros derechos de una forma activa “no ser conformistas”, ya que si no lo hacemos nosotros nadie lo hará. Debemos seguir una lucha, siempre encaminada a la justicia y el respeto por los derechos humanos.

Tenemos que tener una actitud de tolerancia hacia otras creencias u otras formas de pensar, no ganamos nada atacándolas de forma irracional. La laicidad promueve el debate, pero desde un punto de vista racional.

Madalyn Murray O’Hair murió como “la mujer más odiada de América”, lo cual es muy penoso, ya que ni el Estado ni la población civil se interesaron demasiado en esta activista por la libertad de creencia. Esto nos muestra que la mayor parte de la sociedad sigue muy errada en sus creencias, lo cual conlleva a la discriminación e intolerancia, tanto por parte del Estado como de los civiles.

Los derechos humanos son muy claros en cuanto a las libertades que reconocen, ya que dichas libertades son fundamentales para la vida digna del ser humano. El Estado laico se construyó principalmente para garantizar la libertad de creencia y de religión, y promover la igualdad de los ciudadanos. De allí la importancia que tiene la laicidad.

A través de la vida Madalyn Murray O’Hair, la película habla sobre diferentes aspectos en materia de Derechos Humanos, siendo el principal la libertad de creencia y de religión, pero también se habla sobre la igualdad de género, la libertad de conciencia, la libertad de expresión y, en sí, la libertad en su máxima expresión, ya que cada individuo puede forjar su propia vida de la manera que crea más conveniente, sin importar los estigmas religiosos y sociales, siempre y cuando respete los derechos de los demás.